Tübinger Craft Beer, una de las favoritas del mercado artesanal presentó el pasado 16 de octubre su nueva imagen bajo el concepto “el oso cambia de piel.”
En un evento que reunió alrededor de 150 invitados entre prensa, beer geeks y amigos de Tübinger en su casa Flannery’s Beerhouse se generó grato un ambiente de camaradería donde los invitados pudieron probar las cervezas de la marca y conversar con los colaboradores.
Algo de historia
Esta aventura comenzó en 2007 con un germano brasilero en Farellones. Christoph Flaskamp tenía este pequeño proyecto de cerveza artesanal, y como le tenía mucho cariño a la ciudad donde su padre y él estudiaron, decidió hacerle un homenaje.
Este lugar se llama Tubinga, y se ubica a orillas del río Neckar. Si lo ubicamos en el mapa, está a 40 km. al sur de Stuttgart, cuna de la famosa torta de selva negra. “Tübinger” es el gentilicio en alemán de quienes viven en aquella ciudad universitaria.
Poco a poco, en un año la producción de Tübinger pasó de 150 litros a 400, y se trasladó a Rapel. Las ganas de crecer no pararon: En 2011, el empresario gastronómico irlandés Martin Flannery se sumó al proyecto, iniciando la construcción de una planta microcervecera en Pirque. En dos años transformaron una hectárea y sus vidas con esta craft beer.
Tanta agua corrida bajo el puente, hoy la marca cuenta con 6 cervezas en su portafolio fijo y durante el año va lanzando ediciones limitadas.
“Luego de 11 años la marca ha ido evolucionando, pasó de ser de un marcado estilo bien alemán hasta hoy que encontramos nuestra propia identidad. Esta nueva imagen se acerca más a nuestro consumidor final siendo una imagen mucho más entretenida. La imagen sigue una misma línea y está más ordenada, estamos muy satisfechos con el resultado.” Nos comenta Natalia Watkins Sales & Marketing Manager de la compañía.